miércoles, 13 de noviembre de 2013

Cinnamon rolls

Hola!!
Cinnamon rolls o rollitos de canela, en la lengua de Cervantes. Ni leche frita, ni torrijas ni ensaimadas.
El sábado por la mañana los preparé, pues por la tarde Anton tenía partido y así podía llevar la merienda. Repartí entre algunos padres y una mamá me dijo primero que parecía leche frita (el único parecido que le noto es la canela) y luego me dijo que parecían torrijas!!!!
También me dijeron que parecían ensaimadas (¿será la forma?) así que no, son rollitos de canela.....y yo me pregunto....¿porqué la gente siempre busca similitudes?....Yo, simplemente les pongo el nombre correspondiente a cada cosa y no busco el parecido con otras pero parece que todo el mundo lo hace.
Incluso expliqué que este tipo de masa se ha de consumir al dia porque la levadura de panadero hace que no tenga más durabilidad, no como la masa madre.....y me dijo que también había hecho masa madre...que hizo un roscón de Reyes!!. No quise indagar más.
Yo ya había preparado estos rollos otras veces pero no me acababan de convencer hasta que un dia Alma los colgó en su blog y decidí que los suyos los tenía que probar pues ella hablaba maravillas. Así ha sido, son MARAVILLOSOS!!!
Si quereis ver los de Alma, pinchad aquí




CINNAMON ROLLS

Ingredientes: (a mi, estas cantidades me dieron para dos bandejas de 26 cm.)

675gr harina
1 paquete (7 gramos) de levadura seca de panadero
250ml de leche
75gr de mantequilla
75gr de azúcar
1/2 cucharadita de sal
3 huevos L

Lo primero es poner la leche a calentar y disolver en ella la mantequilla, el azúcar y la sal. La dejamos enfriar.
Mezclamos la harina con la levadura.
En la panificadora ponemos la leche ya tibia y echamos la mitad de la harina. Comenzamos a amasar.
Cuando esté todo ligado, ir echando los huevos de uno en uno amasando hasta que esté integrado uno para luego echar el otro.
Añadir el resto de la harina y amasar hasta que se desenganche de las paredes y sea elástica.
Meter la masa en un recipiente bastante grande y engrasado y dejar fermentar un par de horas (si hace calor posiblemente sea menos tiempo).
Mientras la masa crece podemos ir preparando la mezcla de especias.


MEZCLA DE ESPECIAS

Ingredientes:

7 cucharaditas de canela
2 cucharaditas de clavo molido
1 cucharadita de nuez moscada
2 cucharaditas de anís en polvo
1 cucharadita de jengibre en polvo
1/2 cucharadita de cardamomo en polvo

Mezclamos todo estos ingredientes y, excepto una cucharada y media que vamos a utilizar, el resto lo guardamos en un tarro cerrado para próximas ocasiones (¡que las habrá!)


RELLENO

Ingredientes:

Una cucharada y media de la mezcla
150 gr. azúcar moreno
35 gr. harina
120 gr. mantequilla fria cortada en cubitos muy pequeñitos

Mezclar todos los ingredientes con dos cuchillos hasta que parezcan miguitas.
A mi este paso me costó mucho la primera vez que lo hice y esta vez la mantequilla no estaba fria, así que lo mezcle todo y luego lo "unté" con los dedos por la masa y me quedó muy bien.
Pasado este tiempo, sacar la masa del recipiente. Yo le hago un estirado y plegado, Alma dice que hay que chafar la masa.
Estirar con el rodillo hasta que sea un rectangulo de unos 50x30.
Repartir las "migas" o, en mi caso, untar con la pasta de mantequilla toda la superficie y enrollar por la parte ancha de manera que quede un rollo largo.
Cortar rodajas de unos 3 centimetros y repartir en la bandeja que habremos untado de mantequilla.
Dejar reposar hasta que crezca (una hora aprox) y hornear a 190ºC durante unos 25 minutos.

Yo uso el horno con la parte de arriba y la de abajo encendidos, pero hay que vigilar y cuando comience a estar dorada la superficie, tapar con papel aluminio.




jueves, 7 de noviembre de 2013

Galletas de pistola

Hooolaaaa....¿hay alguien ahí?
No se cuanto llevo sin publicar pero sé que es mucho tiempo.
He tenido un verano de esos dignos de olvidar, aunque también ha tenido sus cosas buenas. Espero, a partir de ahora, volver a reanudar mis rutinas.

Galletas de pistola, gracioso el nombre. Son unas galletas riquísimas, parecidas a esas danesas que venden en latas, pero hechas en casa y buenísimas. 
Encontré la receta en Kanela y limón, de casualidad.
Por aquel entonces no tenía la pistolita de marras, así que la guardé en el fondo de mi memoria por si algún día pensaba en ampliar la colección de cachivaches de cocina.
Curiosamente, unos días después, una amiga me dijo que tenía una pistola, que la compró en Lidl  (bendito Lidl para los amantes de los cacharritos) y que allí se quedó, guardada en un rincón.....que si me interesaba....¡¡¡claro!!!
Total, que ya tenía la pistola.
La verdad es que, como dice en Kanela y limón, si sigues las instrucciones al pié de la letra, las galletas salen. Eso si, con estas medidas salen muchas, así que toca repartir y hacer feliz a los allegados y amigos....jijiji.
La mia es eléctrica, va enchufada a la corriente y en vez de un pistoletazo, lo que hago es apoyarla en la bandeja y contar a 3 o a 4 (hay que ir probando) y levantas de golpe. Así queda la masa enganchada en la bandeja y todas las galletas tienen la misma cantidad de masa.
Escribo la receta tal y como la tiene Cristina (Kanela y limón)



GALLETAS DE PISTOLA

Ingredientes:

340 gr. mantequilla (a temperatura ambiente)
240 gr. azúcar
2 cucharadas de leche
1 cucharada de esencia de vainilla
1 huevo
1 cucharadita de levadura (4 gr)
525 gr. harina

Batir bien la mantequilla y el azúcar. Se tiene que batir bastante, hasta que se aclare y sea un poco "esponjosa"
Añadir la leche y la esencia y seguir batiendo.
Cuando esté la leche y la esencia bien integrados, echar el huevo y batir.
Finalmente, añadir la harina mezclada con la levadura. tendremos que acabar de integrar la harina con una espátula, pues es una masa bastante espesa.
Rellenar la pistola con la masa, poner la boquilla que más nos guste y sobre un placa de horno SIN papel vegetal ni engrasada, hacer pistoletazos.
Cuando ya tengamos la bandeja llena de galletas, meter al horno.
170ºC unos 10 minutos. Hay que estar pendiente, pues estas galletas se queman con facilidad. Cuando veamos que alguna ya comienza a estar dorada por abajo, ya se pueden sacar del horno.
Dejar enfriar un poco sin tocar y sacarlas de la bandeja, colocándolas sobre una rejilla hasta que se enfrien.
Yo las guardo en una caja metálica.